Alimentación, agua, medicinas, material escolástico, comedores para niños de la calle, apoyo a distancia… detrás de estos términos hay caras, historias de hombres, mujeres, niños que en tantos países pobres del mundo tienen necesidades urgentes para su subsistencia, buscan una oportunidad para aprender, trabajar, crecer más serenos, con mayor paz, sintiéndose más amados.

Los proyectos que sostenemos quieren llegar a esta humanidad que sufre para decir con los hechos que ser solidarios significa esparcir esperanza, dignidad y ese coraje capaz de transformar incluso las situaciones más difíciles.